K A I R O S

A partir de la presentación de los delegados, el inicio de sesión pone de facto en la discusión la preocupación por la seguridad enmarcada en el terrorismo cibernético. En este sentido, los tipos de gobierno y las restricciones presupuestales de los diferentes Estados configuran un obstáculo para el desarrollo de prácticas unificadas en contra del uso del internet para fines terroristas.

 

Los presentes delegados desean ser garantes de la paz y de los Derechos Humanos de la población civil, y consideran relevante la articulación de principales actores privados para certificar la seguridad. Sumado a esto, hay un consenso en la ilegitimidad que sufren los gobiernos y las instituciones bajo casos de ciberterrorismo: las alarmantes cifras de ataques cibernéticos implican una necesidad generalizada de sistemas de seguridad influyentes y eficientes.

 

Durante la primera sesión se desarrollaron análisis integrales acerca del terrorismo y el uso del internet como herramienta que no solo afecta a las instituciones, sino que además promueve las prácticas de grupos terroristas que inciden en la vida de los civiles. Esta situación se agrava cuando existe un alto índice de grupos armados al margen de la ley. Para los actores presentes es necesario desarrollar la protección de las comunidades locales y de los corredores comunitarios que se han visto afectados por actos clandestinos y terroristas por dichos grupos.

 

Se necesita desarrollar tecnología para el control y monitoreo del transporte ilegal de armas

-Igor Keyasev

 

Sumado a esto, el comité establece como una prioridad ejecuciones no violentas bajo el marco del uso del internet. La seguridad no debe interrumpir en la soberanía nacional de manera violenta, el ciberterrorismo requiere acciones contundentes de parte de las agencias de seguridad y los gobiernos, por ende, los esfuerzos se deben enfocar en la prevención de la divulgación e incitación a estas prácticas.

 

No se debe usar el hard power para interceder en algunos países

-Wen Jiabao

 

La sesión concluye con el tema del terrorismo e internet y cómo estos factores en conjunto han permitido la explotación de los recursos naturales, como el coltán. Tal como lo evidencia el Abdul Rahim, diferentes empresas multinacionales involucradas en temas tecnológicos han promovido las extracciones de estos recursos en países que sufren de conflictos internos, lo que a su vez genera problemas de índole social, tales como la educación y el trabajo infantil de la población. Dichos países, además, rechazan los servicios de empresas privadas que han tenido relaciones con el imperialismo para mejorar su seguridad cibernética.

 

Las herramientas y acuerdos que se buscan concretar en el comité para la seguridad mundial en materia de terrorismo cibernético empiezan a reducirse, mientras que los temas de discusión se amplían. ¿Cuál será el camino más eficiente para lograr la seguridad cibernética?